540 €

Durante siglos, los monasterios han sido custodios del arte, el pensamiento y el silencio. Hoy, muchos de ellos se deterioran en la sombra, esperando una oportunidad para renacer.

El Monasterio de San Antonio el Real, en Segovia, ha comenzado ese renacimiento. Fundado en el siglo XV por Enrique IV y habitado durante generaciones por una comunidad de clarisas, este conjunto monástico alberga una riqueza artística y espiritual excepcional: artesonados mudéjares, retablos flamencos, mobiliario regio y estancias palaciegas que narran siglos de historia.

Gracias a la iniciativa de Camino del Asombro, el monasterio ha abierto por primera vez sus puertas al público después de casi seis siglos de clausura. Pero la reapertura no es un punto de llegada, sino el primer paso de un proyecto más amplio, que busca no solo restaurar la arquitectura del lugar, sino también revitalizar su esencia como espacio de contemplación, experiencia y conocimiento.

Un gesto simbólico, una acción real

Esta campaña de micromecenazgo invita a participar en ese proceso a través del apadrinamiento de estrellas. Las estrellas decoran los techos de la sala capitular y de los pasillos del claustro, y cada una de ellas puede ser simbólicamente vinculada al nombre de una persona comprometida con este legado.

Apadrinar una estrella no es solo un gesto estético: es una manera concreta de sostener el presente y proyectar el futuro. Es asumir una responsabilidad colectiva con aquello que merece ser preservado.

Cómo colaborar

Apadrinar una estrella es muy sencillo y se hace directamente desde esta misma página. Solo necesitas introducir tu correo electrónico en el formulario y, una vez registrado, podrás elegir tu estrella —en la sala capitular o en los pasillos del claustro— desde la columna derecha.

Si lo prefieres, también puedes colaborar haciendo una donación libre en la misma plataforma o bien por transferencia bancaria: ES9701280075500100057487.

Qué se financiará

La ayuda que se reciba se destinará, en primer lugar, a consolidar lo ya restaurado: limpieza y mantenimiento de los espacios abiertos al público, control de humedades, conservación preventiva de bienes muebles, adecuación museográfica y materiales de interpretación.

En segundo lugar, permitirá acondicionar nuevas zonas para su apertura, especialmente aquellas vinculadas a la experiencia espiritual, como antiguas celdas, estancias de oración o espacios de retiro, con el objetivo de devolverles su dignidad y accesibilidad.

El tercer propósito de esta campaña es abrir camino para intervenir en otros monasterios que forman parte del programa Camino del Asombro: espacios igualmente valiosos, pero más olvidados, más frágiles, más urgentes. Lugares que, en muchos casos, siguen cerrados o deteriorándose en silencio, y que podrían recuperar su sentido si cuentan con los recursos necesarios.

Cada estrella apadrinada en San Antonio el Real es, también, una chispa encendida en esa red de espacios que aún laten bajo el polvo.

Quiénes somos

Camino del Asombro es una entidad sin ánimo de lucro que funciona como estructura madre: un nombre común que cobija un conjunto de acciones, lugares y personas dedicadas a un mismo fin.

Esa finalidad no es otra que la de recuperar, en su sentido más amplio, el patrimonio espiritual, cultural y material de los monasterios en España; no solo para preservarlo, sino también para devolverle su sentido original, para que estos espacios —muchos de ellos olvidados o a punto de desaparecer— vuelvan a tener un lugar en la vida contemporánea.

Objetivo económico

El objetivo mínimo de esta campaña es alcanzar 20.000 €, una cantidad que permitirá asegurar la consolidación de las actuaciones realizadas y habilitar nuevos espacios de acceso público.

El objetivo óptimo es de 40.000 €, lo que nos permitiría ampliar el alcance de la restauración, fortalecer la estructura del proyecto y preparar la intervención en otros monasterios del programa Camino del Asombro.

Necessidades do projeto

El proceso de recuperación del Monasterio de San Antonio el Real se encuentra en marcha, pero aún requiere apoyo para consolidarse y crecer. Esta campaña de micromecenazgo responde a cinco necesidades concretas:

• Consolidar las actuaciones ya realizadas, garantizando el mantenimiento de los espacios abiertos al público, la limpieza especializada, el control ambiental y la conservación preventiva de los elementos artísticos y arquitectónicos restaurados.
• Habilitar nuevas zonas del monasterio, con especial atención a aquellas vinculadas a la vida espiritual. Algunas de ellas —como celdas antiguas, locutorios o estancias de uso contemplativo— necesitan ser acondicionadas para su apertura al público, respetando su identidad y favoreciendo una experiencia de recogimiento.
• Desarrollar contenidos interpretativos y de mediación cultural que faciliten la comprensión del monasterio, no solo desde una perspectiva artística o histórica, sino también desde su dimensión simbólica, espiritual y existencial.
• Fortalecer la estructura de gestión del proyecto, dotándolo de los recursos necesarios para sostener su apertura continuada, coordinar las visitas, garantizar su accesibilidad y comunicar adecuadamente el sentido del recorrido.
• Extender el programa Camino del Asombro a otros monasterios, activando los primeros estudios e intervenciones en espacios igualmente valiosos y en riesgo de desaparición. Esta campaña no es solo una acción puntual: es el germen de una red.

Tu aportación es una pieza necesaria en esta cadena de cuidado. Cada estrella apadrinada hace posible una restauración más profunda, más sostenida y más compartida.